Con enorme gratitud y celebración hemos finalizado esta cuarta cohorte de egresadas de nuestra querida Escuela de Formación en Duelo Gestacional y Perinatal.
Comparto algunos testimonios de las alumnas recientemente graduadas.
Lina Arboleda (Colombia)
«María Andrea quise encontrar palabras para describir mi percepción de la experiencia de la Formación:
Respeto
Empatía
Amor
Vulnerabilidad
Fortaleza
Sensibilidad
Claridad
Experiencia
Generosidad
Sabiduría
Conocimiento
Abundancia
Militancia
Feminismo
Cambio
Sanación
Transmutación
Consciencia
Mi semilla fue el deseo de que pudiéramos sentirnos libres de expresar nuestro dolor, nuestras lágrimas y nuestra vulnerabilidad sin disculparnos; gracias por abrir este espacio de formación tan único, amoroso y transformador.
Gracias, gracias, gracias.
Te abrazo con mi corazón».
Claudia Sofía Kaleniuk (Argentina)
«Esta formación fue una Inmensa Transformación 6 meses inolvidables
Un crecimiento amoroso y cálido. Un regalo del cielo
Llevando luz a la oscuridad, palabras a los silencios
Honrando a nuestr@s ancestr@s
Amando la vida
Gracias mis niñas por guiarme hasta este profundo renacer por mostrarme mi fuerza la que no sabía que tenía.
Gracias a mis pequeñitas por enseñarme el significado de Eternidad
Gracias por tantto Marìa Andrea Garcia Medina«
«Hoy finaliza un maravilloso camino,
Fueron 6 meses llenos de
infinito aprendizaje
la expectativa era ser acompañante,
pero yo fui acompaña,
contenida, aceptada,
cobijada, sentí tanto amorcito,
que trascendió la virtualidad del zoom
En ese circulo sagrado de mujeres,
fuimos sanando juntas,
creciendo juntas,
alegrandonos juntas,
llorando juntas,
permitiendo que la vulnerabilidad
floreciera y nos diera alivio,
al dolor de una,
que es el dolor de todas
Como dijo hoy una querida compañera,
Nunca más solas
Gratitud infinita a las hermanas de camino que conocí en este espacio sagrado y que espero sigamos acompañándonos
Con todo el reconocimiento a cada una de mis compañeras.
Gratitud por sostener el círculo Marìa Andrea Garcia Medina
por tu sabiduría,
generosidad,
entrega,
tu calor,
tu humildad,
por tener la palabra justa
y tan llena de poesía,
sin duda una gran maestra
Hoy se cierre un ciclo,
pero se abren una infinidad
de caminos,
posibilidades,
se vienen novedades,
cambio en en el nombre de la cuenta,
pero todo gestado desde el más infinito
amor y cariño
Gratitud mi Linazito,
que me va sorprendiendo día a día,
en el proceso de honrar su legado,
de transformar el dolor en Amor
Por gestar este espacio de acompañamiento
y por mostrarme el camino
Gratitud a mi Amelia
que le da colores a mi vida,
me llena de alegrías y aprendizajes,
que me enseñó a confiar
Gratitud a tod@s los bebés
de mis hermanas de camino,
a los bebés que han llegado
y los que vendrán,
a los herman@s
que a algunas nos dan el título de
Reconocemos y honramos,
su vida y existencia «
Les dejo los testimonios de las compañeras Lina, Claudia y Nicol, que me llenan de emoción y gratitud, por su conmovedora devolución.
Hemos abierto el espacio, lo hemos gestado juntas, es con ustedes y junto a ustedes, son mujeres que han abierto su corazón y su alma entera, han transformado su dolor en luz, en plena potencia femenina.
Por eso decimos que del campo de la vulnerabilidad se abre un campo de fuerza colectiva, siendo «el dolor de una el dolor de todas, siendo que sana una sanamos todas»
Honrando el Lema de nuestra Escuela de Formación «QUE LA FUERZA DE LA VIDA, VUELVA A ESTAR AL SERVICIO DE LA VIDA».
Agradezco las lágrimas, las risas, todos los relatos, a todas y a cada una, a sus linajes, a sus sistemas familiares, a nuestros ancestros, a su dolor y a su fuerza de superación.
Sabiendo como el «rio sagrado de la vida» nos llega de generación en generación, incluyendo a todos los que han partido tempranamente, habiendo sido duelos no reconocidos, les hemos dado la bienvenida, hemos dejado inscripta su huella en el corazón de nuestras familias.
Seguiremos al servicio de este campo que es el duelo gestacional y perinatal, al servicio de las familias en duelo, en la militancia desde el reconocimiento y el respeto que se merecen.
Lic. María Andrea García Medina.